En un partido cargado de tensión y rivalidad, Francia se impuso por 1-0 a Argentina y avanzó a las semifinales del fútbol masculino en los Juegos Olímpicos de París 2024. El ambiente hostil se evidenció desde antes del silbatazo inicial, con abucheos al himno argentino, recordando las fricciones entre ambos países tras la Copa América.
El gol tempranero de Jean-Philippe Mateta, a los cuatro minutos del primer tiempo, definió el encuentro. El delantero francés aprovechó un córner para conectar un certero cabezazo que venció al arquero argentino Gerónimo Rulli. Desde ese momento, el equipo dirigido por Thierry Henry dominó el ritmo del partido, cediendo terreno a una Argentina que no logró encontrar claridad en su juego.
Los franceses, con una defensa sólida y contragolpes rápidos, mantuvieron a raya a la Albiceleste. Jean-Philippe Mateta y Michael Olise fueron figuras destacadas en la ofensiva, mientras que Alexandre Lacazette aportó experiencia y control en el mediocampo. Argentina, por su parte, tuvo una oportunidad clara a los 30 minutos con un disparo lejano de Ezequiel Fernández, pero el portero Guillaume Restes respondió con una excelente atajada.
Giuliano Simeone también desperdició una ocasión con un cabezazo desviado, dejando escapar la posibilidad de igualar el marcador. La imprecisión y la falta de eficacia en el último tramo del campo fueron constantes para el equipo sudamericano, que no logró romper la férrea defensa francesa.
En el segundo tiempo, el partido se tornó más trabado, con constantes cambios de posesión y pocas jugadas de peligro. La tensión en las gradas creció a medida que avanzaba el tiempo y la diferencia mínima persistía.
Francia estuvo cerca de aumentar su ventaja a los 68 minutos, nuevamente con un cabezazo de Mateta que salió desviado. En los minutos finales, un gol de Michael Olise fue anulado tras la revisión del VAR por una falta previa de Maghnes Akliouche, lo que generó polémica y reclamos.
El árbitro uzbeko Ilgiz Tantashev añadió 10 minutos de descuento, que se extendieron a 12, lo que dio a Argentina una última oportunidad para empatar. Sin embargo, la presión llevó a la Albiceleste a tomar decisiones apresuradas y sus intentos desesperados terminaron en pelotazos sin destino o remates desviados.
Con el pitazo final, la celebración francesa se vio opacada por una trifulca entre ambos equipos en el campo y en el túnel del estadio, dejando una imagen lamentable en el marco de los Juegos Olímpicos.
Francia avanza a las semifinales, mientras que Argentina se despide del torneo, dejando atrás un partido marcado por la rivalidad y la tensión tanto dentro como fuera del campo.