En el extremo norte de Chile, el número de incendios forestales ha experimentado un alarmante incremento del 120% durante el último año, según datos de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), reportados por *El Mercurio*. Desde el 1 de julio de 2023 hasta el 1 de julio de 2024, se registraron 11 incendios, en comparación con los cinco ocurridos en el mismo periodo del año anterior.
Esta tendencia se mantiene en los últimos cinco años, con un aumento del 38% en la incidencia de incendios forestales entre 2019 y 2023. Casos destacados incluyen la quema de más de 47 hectáreas de pastizales en el valle de Camarones y otro incendio que arrasó con 32 hectáreas cerca de la localidad de Belén, ambos en la Región de Arica.
Ante esta preocupante situación, Conaf ha anunciado la creación de una Unidad de Control de Incendios Forestales, compuesta por un equipo de ocho brigadistas que se dedicará exclusivamente a combatir estos siniestros a partir del próximo año.
«La mayoría de estos incendios forestales corresponde a quemas no autorizadas que se descontrolan y que están ubicadas en predios agrícolas de difícil acceso para brigadistas y bomberos», señaló Conaf. Esta dificultad para acceder y controlar el fuego ha resultado en la pérdida de especies protegidas, una situación que la nueva unidad espera mitigar.
La implementación de esta nueva estrategia busca mejorar la respuesta ante los incendios y proteger tanto los recursos naturales como la biodiversidad de la región.